Con un déficit de elementos, SSPM dice que vigilancia de vecinos puede ayudar.
La Policía de Tijuana pide dejar atrás las estadísticas que dicen que Tijuana es la quinta ciudad más violenta del mundo, pero los ciudadanos creen que a las autoridades no les alcanza para resolver este problema.
Dicen que la voz del pueblo es la voz de dios. Y aunque autoridades rechazan que Tijuana sea la quinta ciudad más violenta del mundo, es una realidad que los ciudadanos no se sienten del todo seguros.
El problema no es sencillo de resolver. El municipio no tiene los policías que requiere, y aunque algunas personas lo comprenden, no significa que estén conformes.
La situación más cruenta son los homicidios. En menos de tres meses casi suman 400 y los tijuanenses notan el correr de sangre en las calles.
La Secretaría de Seguridad de Tijuana cuestionó la metodología usada por la asociación civil que midió la violencia en el mundo, pero pide dejar atrás esa confrontación.
Y vaya que hace falta. En las últimas semanas algunas colonias se están organizando para detener ladrones.
¿Y es que hoy quién no conoce a una víctima reciente de robo o de asalto?
Esa sensación de estar desprotegidos es lo que genera organización y molestia de los vecinos.
El Secretario Sotomayor dice que organizada esta medida puede funcionar, y cree que la gente está más preocupada por los robos en sus colonias.
Por eso otros ciudadanos perciben que Tijuana sí se ha vuelto más violenta, y aunque no comparten la idea de hacerse justicia, la comprenden.
Las estadísticas y las encuestas siempre serán cuestionables, pero un asesinato o un robo siempre alteran la vida tranquila que la mayoría quisiera.