El venezolano ya se reportó desde el primer día de pretemporada y sólo piensa en alistar el camino, para pelear por el campeonato en la Serie del Rey.
TUCSON, AZ, EEUU (AER/CTT).- Venezolano de nacimiento, pero desde la temporada 2016 es tijuanense por adopción.
Esa ha sido la historia de Juan Apodaca, quien en un par de meses supo ganarse el cariño de a afición por su sólido y oportuno madero, pero sobre todo por su gran carisma que lo ha hecho uno de los jugadores favoritos de los fanáticos.
“Fue una experiencia bastante bonita, la verdad que a Tijuana ya puedo llamarla mi segunda casa; estoy muy contento y agradecido con todos esos fanáticos de que les haya gustado mi trabajo y poderlos ayudar para darles esa motivación y esa felicidad al llevarlos a la Serie del Rey el año pasado”, recordó.
Al igual que el año pasado, Apodaca reportó desde el primer día de pretemporada y sólo piensa en alistar el camino para pelear por el campeonato en la Serie del Rey.
“Este año vamos por más; vamos por el campeonato; hoy me sentí bastante contento y agradecido; es una muy bonita experiencia y una nueva oportunidad de ir por el campeonato y un compromiso bastante grande junto a mis compañeros y también junto a la fanaticada de Toros de Tijuana”, agregó.
Luego de caer en la Serie del Rey ante Pericos de Puebla, Apodaca pasó tiempo entre algodones, al entrar a quirófano para reparar su rodilla derecha.
“Ya en el invierno cuando se acabó la final tuve que hacerme una cirugía en el menisco interno de la rodilla derecha; me había salido un quiste en la parte de atrás de la rodilla y lo limpiaron, así que luego tuve bastante reposo y estuve en rehabilitación”, explicó.
En su primer escarceo de pretemporada, el venezolano no tuvo problemas para superar los exámenes físicos y de cumplir con la primera sesión de práctica.
En 2016 bateó para .322 con catorce cuadrangulares y 69 carreras empujadas.