Se reúnen en San Diego para tratar de encontrar soluciones.
Autoridades de México y Estados Unidos se reunieron en San Diego para buscar soluciones a temas referentes al agua, entre ellos, la problemática de los derrames de aguas negras que llegan a las costas estadounidenses desde Tijuana.
En la reunión del Comité del Senado de la Cooperación California-México, se habló de crear un plan de acción para controlar el flujo que llega desde el sur de la frontera, aunque hay reconocimiento de que la estrategia depende de que México reciba financiamiento para atender problemas de infraestructura.
El senador Ernesto Ruffo Appel reconoció que la falta de atención al problema derivado de retos financieros por parte de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) está afectando la relación bilateral.
Hace unos días, el alcalde de Imperial Beach, Serge Dedina denunció un supuesto derrame de aguas negras que generó malestar a bañistas en la playa del sur del condado. La CESPT negó tener evidencia que compruebe que ocurrió la contingencia.
El alcalde mostró su descontento ante la situación ya que dice, el mal olor y muestras de agua insinúan lo contrario.
La solución llegará a largo plazo y dependerá de que las agencias mexicanas reciban financiamiento, ya que la reparación de colectores no será la respuesta, coincidieron académicos.