El problema es que el banco de ADN es muy pobre en Baja California.
Tras la localización de más de 120 kilos de osamentas en el predio conocido como La Gallera en Tijuana y que fueron trasladados a la Ciudad de México para la obtención de AND, Fernando Ocegueda, presidente de la Asociación Unidos por los Desaparecidos en Baja California informó que ya salieron los primeros resultados que les permitirá identificar los huesos.
Pero el problema es que la Procuraduría General de Justicia del Estado tiene un banco de ADN de los familiares muy pobre, al contar únicamente con 400, por lo que en las próximas semanas estarán dando a conocer un programa para invitar a los familiares de desaparecidos acercarse a las instalaciones de los Hospitales Generales del Estado para la toma de las muestras.
La convocatoria será para los padres, hermanos y hasta primos de las personas extraviadas.
Ocegueda informó que a partir del próximo lunes 23 de octubre reiniciarán con los trabajos de búsqueda en el mismo predio, donde participarán diversas dependencias federales y estatales.