“Solo quería conducir un poco”, contó el niño de ocho años a la policía.
En Soest, Alemania, un niño de ocho años puso en marcha una operación policial al tomar el auto de su madre y conducirlo solo y a gran velocidad por una autopista alemana.
Según el Westfälische RundSchau, el niño alcanzó una velocidad de 140 kilómetros por hora antes de dirigirse hacia un estacionamiento situado a ocho kilómetros de su casa.
Al ser descubierto por la policía, contó que “había terminado el viaje por su cuenta” y “Solo quería conducir un poco”.
La policía no sabe cuánto tiempo estuvo conduciendo por la autopista. “Al menos estaba a ocho kilómetros de su casa”, comentó un portavoz de la policía. Según el cuerpo policial, “aparentemente no le pasó nada al niño ni al vehículo”.
De todos modos, la policía no tiene pruebas de que hubiera ocurrido un accidente durante el viaje del niño de ocho años.
Terminó su viaje porque “no se había sentido cómodo a 140 km en la carretera”, aseguró el informe policial.
