El ex entrenador asumió oficialmente la vicepresidencia ejecutiva de los Jaguars.
Foto: Bob Self (AP Photo).
Tom Coughlin puso fin a su año sabático y sorprendió a todos al asumir su nuevo rol con los Jacksonville Jaguars. No como entrenador en jefe, sino como vicepresidente ejecutivo de operaciones deportivas.
Y es cierto: si una persona vuelve a cierta empresa, no será para hacer precisamente lo mismo. Es para algo mejor, pues tiene el control de todo.
Coughlin, antes de guiar a New York Giants a ganar dos Super Bowls, fue el primer estratega en la historia en los Jaguars y sigue siendo quien mejor ha hecho su labor. Entre 1995 y 2002, el ex pupilo de Bill Parcells los llevó a dos Finales de Conferencia en enero de 1997 y de 2000.
Ganaron 49 partidos de temporada regular en sus primeros cinco años a cargo de él, un promedio notable para un equipo de expansión de casi 10 victorias por año.
Ahora Coughlin, quien fue el timonel vacante más buscado en las últimas semanas, asume un compromiso mayor, pero con menos desgaste físico-mental.
La responsabilidad en el banquillo se la deja al recién llegado Doug Marrone y Dave Caldwell recibió una extensión de contrato de dos años como gerente general.
Coughlin regresó a casa y con todos los honores.
