Es un avance tecnológico bastante esperanzador para los científicos.
A pesar de que la realidad virtual sigue creciendo a gran escala, todavía se ocupan de muchos retoques para que se considere real.
La principal sensación que hace falta es el tacto, ese sentido que nos proporciona una mayor interacción con los objetos presentes y que permite apreciar los límites del habitáculo en el que estamos.
Pues ahora, científicos del Instituto Hasso-Plattner de Postdam han demostrado en la conferencia del CHI’17 un sistema háptico con el objetivo de llevar esas sensaciones de tacto al jugador, haciéndole creer que tiene de verdad una pared o está empujando un objeto pesado.
El usuario porta unos parches de electroestimulación de los que se utilizan en sesiones de rehabilitación muscular y que, conectados a un controlador, se encargan de activar los músculos imitando la sensación de estar empujar un objeto o presionar una pared.
El sistema ocupa de unas Gear VR y un controlador USB para funcionar. Por un lado, las demos muestran las capacidades del sistema cómo lo son las diferentes texturas y resistencias, mientras que otra demo imita lo que se siente recibir una descarga eléctrica al tocar una pared electrificada.
Para la comunidad científica, es desde luego un avance tecnológico bastante esperanzador, y se espera que ésta y otras compañías se animen a seguir incluyendo sensaciones físicas a una realidad virtual que empieza a quedar corta de emociones.
