Nuevos estudios sobre los efectos del cigarrillo electrónico.
Los cigarrillos electrónico que parecen un producto de moda, en realidad iniciaron desde el año 2003 en China bajo la marca Ruyan, fueron creados por el farmacéutico Hon Link en una búsqueda por combatir el cáncer de pulmón.
Sin embargo hoy en día su eficiencia para combatir la necesidad de nicotina en los fumadores sigue en duda, debido a los componentes del vapor de estos cigarrillos que en muchos de los casos se consideran cancerígenos:
- Nicotina, Aldehídos / Formaldehído,
- Nitrosaminas
- Partículas de metales (cadmio, níquel, cromo, plomo y arsénico) y silicatos (tóxicos)
- Nornicotina.
- Hidrocarburos aromáticos.
Otra de las corrientes habla de que el cigarrillo electrónico es mucho más peligroso que los cigarrillos tradicionales y promueve la adicción.
Contrariamente a estas corrientes la Universidad Colegio de Londres presentó un nuevo estudio en el aseguran que los cigarrillos electrónicos y las terapias de reemplazo son muchas más seguros que fumar y sugieren que hay un bajo riesgo en su uso a largo plazo.
Los investigadores aseguran que este método puede salvar la vida de millones de personas y esperan mejorar las formulas aromáticas utilizadas en algunas marcas de cigarrillos