El cardenal cubano Jaime Ortega Alamino murió este vienes a los 82 años de edad, después de una larga batalla contra un cáncer; fue la máxima autoridad católica en Cuba, promotor de las visitas pastores de los últimos tres pontífices de la iglesia católica y mediador en la liberación de presos políticos.
La Conferencia de Obispos Católicos de Cuba informó del deceso del arzobispo emérito de San Cristóbal de La Habana, cuyos funerales se realizarán en la Catedral de La Habana.
Ortega Alamino fue pieza clave en el acercamiento diplomático entre Estados Unidos y Cuba, cuya negociaciones se realizaron de manera secreta con la participación del Papa Francisco, y culminaron en 2014 con el restablecimiento de las relaciones entre La Habana y Washington, bajo la presidencia de Raúl Castro y Barack Obama.