Las modificaciones corporales implicarán dilemas éticos para la sociedad.
Para el fundador de Tesla y Space X, Elon Musk, la mayoría de nosotros somos cyborgs, mitad humanos- mitad máquinas, debido a que utilizamos máquinas que nos sirven como extensiones de nuestro propio cuerpo, como los smartphones y las computadoras. Sin embargo, las modificaciones corporales que se avecinan gracias a las nuevas tecnologías implican dilemas éticos que deberán ser tomados en cuenta para prevenir la desigualdad y violencia en nuestra sociedad.
He aquí una lista con las modificaciones corporales que podrían convertirse en instrumentos cotidianos para buena parte de la población a nivel mundial:
- Chips de identificación por radiofrecuencia (RFID). Pequeños dispositivos que pueden ser implantados en las manos o muñecas para realizar pagos y como una forma de identificación universal o con fines de seguridad.
- Exoesqueletos. El diseño y desarrollo de esqueletos exteriores son capaces de ayudar a los seres humanos a realizar tareas que antes parecían imposibles. Más importante aún, estas máquinas pueden ayudar a caminar de nuevo a las personas con cualquier tipo de lesión en la columna vertebral.
- Traducción en tiempo real. La Inteligencia Artificial ha ayudado a hacer más eficientes y precisos los traductores en tiempo real. Son muchas las compañías que se han dedicado al desarrollo de traductores de texto, visuales y auditivos que funcionen en tiempo real.
- Visión aumentada. La tecnología ha llegado a un estado de su desarrollo en el que prácticamente es capaz de restaurar completamente la visión de una persona e incluso, de aumentar tres veces el alcance de una visión 20/20, que se considera normal.
- Lentes de contacto inteligentes. Las compañías tecnológicas Sony y Samsung patentaron unos lentes de contacto inteligentes capaces de grabar vídeo al parpadear. También son capaces de medir los niveles de glucosa en las lágrimas y así alertar a una persona con diabetes cuando su nivel de azúcar es demasiado bajo o alto.
- Partes del cuerpo hechas con impresoras 3D. Las partes del cuerpo hechas con impresoras en 3D se están convirtiendo cada vez más en una realidad. La implantación de órganos vitales, como el hígado, el corazón y los riñones impresos en 3D podrá salvar la vida de millones de personas que esperan durante mucho tiempo el trasplante de alguno de estos órganos.
- Medicinas inteligentes. La mayoría de los medicamentos que recetan los médicos tienen un efecto que depende sobre todo del paciente al que le son suministrados. En el futuro podríamos tener medicamentos que se adecuen a las necesidades de cada persona e incluso, a su organismo.
- Interfaces cerebro-máquina. En la actualidad, muchas personas pueden controlar sillas de ruedas, prótesis y drones con la mente, y tal vez esto sea posible para todo un grupo de otros dispositivos.
- Bebés de diseño. El 2016 fue el año de la técnica CRISPR-Cas9, con la que se podrán prevenir muchas enfermedades hereditarias incluso antes de que la persona nazca. Esto asegura el nacimiento de bebés en los que se ha eliminado la potencial aparición de una enfermedad que aqueja a sus padres o a sus abuelos. Esta tecnología podría incluso modificar a nuestra especie por entero, al crear bebés humanos con características específicas de acuerdo con el deseo de sus padres.