Científicos chinos lograron modificar los genes de 12 cerdos para obtener carne con menos grasa, lo que ayudará en el consumo humano, hasta el momento se logró reducir hasta un 24%.
Como parte de la modificación genética, se usó una herramienta conocida como CRISPR-Cas 9 y la proteína UCP1 relacionada con la regulación de la temperatura corporal y por lo tanto en el consumo de grasa, una función que tienen otros mamíferos como los ratones.
La idea de este proyecto es encontrar la forma de que los cerdos necesiten menos calefacción en invierno, gracias a la auto regulación de la temperatura.
Por momento falta que los cerdos crezcan sanos y que esta modificación genética sea segura para el consumo humano y reciba la aprobación de los organismos de salud.