Inauguran par de bibliotecas en el penal de esta ciudad.
Noemi y Julia tienen 8 y 16 años como internas en Tijuana respectivamente, pero leer las pone en libertad.
«Al leer me pongo en libertad, me libero y exploro nuevos paisajes» compartieron las reclusas al platicar con ellas sobre el beneficio de la lectura, leer para vivir, porque leer salva, declararon.
De acuerdo a las reglas Mandela sobre el tratamiento a los reclusos, el encarcelamiento no debe ser un tiempo desperdiciado de sufrimiento y humillación, debe convertirse en una etapa de desarrollo personal en beneficio de la sociedad.
La mañana de este lunes se reinauguraron un par de bibliotecas en el Cereso de la Mesa en Tijuana, por parte de la Fundación Rebeca Lan que también ha beneficiado con este proyecto a reclusas en Santa Martha Acatitla.
Son más de 4 mil 500 títulos de diversos géneros.
Algunos de los los internos, entre hombres y mujeres gozan del beneficio de la lectura y se espera que estas actividades estén coordinadas por los mismos internos, entre el préstamo de los libros y la revisión de los mismos para catalogarlos.
Al evento asisiteron autoridades, quienes se comprometieron a continuar con la labor más allá de los libros.
Con este nuevo proyecto se verán beneficiados más de 3 mil 600 personas tan solo en este penal.
Los internos además de leer cuentan con otros talleres que también les benefician.
Leer para imaginar nuevos mundos, fue la conclusión a la que se llegó tras el evento.






