El AfD dice que la inmigración pone en riesgo a la cultura alemana, pero niega ser racista o antisemita.
Grupos judíos en Europa y Estados Unidos manifestaron su preocupación por el éxito del partido Alternativa para Alemania (AfD), de ultraderecha, en la elección parlamentaria del domingo y llamaron a otros grupos a no formar alianzas con éste.
Sin embargo, un importante miembro de AfD, dijo que los judíos no tienen nada que temer por el éxito de su partido.
La extrema derecha no había tenido representación en el Parlamento desde la década de 1950, un reflejo de los esfuerzos de Alemania por distanciarse de los horrores del Holocausto nazi.
El presidente del Congreso Mundial Judío, Ronald Lauder, se refirió a la canciller alemana Angela Merkel como una “verdadera amiga de Israel y el pueblo judío” y lamentó los logros del AfD en momentos en que el antisemitismo aumentaba en todo el mundo.
“No hay nada en nuestro partido o en nuestro programa que pueda o deba preocupar en forma alguna a los judíos que viven en Alemania”, comentó a periodistas el principal candidato del AfD, Alexander Gauland.
Gauland provocó indignación durante la campaña electoral cuando dijo que los alemanes deberían estar orgullosos de lo logrado por sus soldados en las dos guerras mundiales.
Alemania, donde hoy viven cerca de 200 mil judíos, ha construido en las últimas décadas una reputación como un lugar tolerante y seguro para que vivan los judíos.