Recientemente investigaciones del Hospital del Mar de Barcelona dieron como resultado que la grasa abdominal en mujeres aumenta el riesgo de sufrir un infarto cerebral a diferencia de los hombres, los resultados podrían utilizarse como una herramienta para predecir el riesgo de Ictus.
El infarto cerebral se presenta cuando una parte del cerebro deja de recibir sangre, ocasionando la muerte neuronal.
Otro riesgo de infarto cerebral está ligado a los cambios hormonales, al consumo del alcohol, y el tabaquismo, por lo que las secuelas suelen ser más graves en mujeres que en hombres, el 16% de las mujeres que lo padecen mueren por esta causa.
En España el Ictus es la principal causa de muerte en mujeres jóvenes y la segunda en hombres, de ahí la importancia de contar con una nueva herramienta de diagnóstico.