Con 415 votos a favor, la Asamble Nacional de Francia pasó la ley antiterrorista que permite ordenar arrestos domiciliarios sin necesidad de una autorización de un juez, entre otras medidas polémicas.
La Asamblea Nacional francesa aprobó este martes una ley antiterrorista presentada por el gobierno para dar respuesta a la “amenaza duradera”, que la izquierda critica por violar las libertades civiles.
Además de los votos de los diputados de La República En Marcha (LREM), el partido del presidente Emmanuel Macron, ampliamente mayoritario, el proyecto recibirá el apoyo de algunos parlamentarios de derecha y socialistas.
El ministro del Interior, Gérard Collomb, defendió a la nueva ley como “extremadamente útil” frente a una “amenaza extremadamente grave”.
La ley que debe ser aprobada transcribe al derecho común algunas medidas del estado de emergencia instaurado en Francia tras los atentados del 13 de noviembre de 2015, que dejaron 130 muertos.
Entre las más polémicas, figuran las detenciones domiciliarias sin orden previa de un juez y la ampliación de los controles de identidad en torno a las estaciones de ferrocarril y los aeropuertos.
La ley ha sido severamente criticada por la izquierda radical y las organizaciones defensoras de los derechos humanos porque, sostienen, viola la presunción de inocencia y el respeto de la vida privada.