La mujer mayor tenía las manos cercenadas de acuerdo a la PGJE.
Una mujer de 45 años, otra de 18 y un menor de 16 años fueron ejecutados y sus cuerpos abandonados en un canal de la colonia Granjas Familiares de Tijuana.
De acuerdo a las primeras investigaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado, los dos jóvenes eran hermanos y trabajaban para la mujer mayor.
Hasta el momento se tienen varios móviles del crimen, pero los más contundentes son dos: el primero, relacionado con posibles deudas del menor de edad por la compra y venta de drogas y el segundo asociado al pasado criminal de la víctima mayor, pues tenía antecedentes por robos.
Esta última teoría se refuerza debido a que la mujer fue encontrada con las manos cercenadas, que generalmente se asocia a venganzas por motivos de robos.