Se utilizaron filtros especiales que tendrán que renovarse cada dos meses.
Tras los trabajos de la Comisión Estatal de Servicios Públicos en Tijuana con la instalación de filtros en alcantarillas, los malos olores desaparecieron.
Eran 38 alcantarillas en diversos puntos, algunas en el centro y otras sobre la vía rápida que generaban los malos olores en Tijuana.
Ahí se implementó un programa piloto para instalar filtros que permitieron que el hedor desapareciera.
Los filtros especiales contienen un líquido para evitar que los malos olores salgan a las vialidades.
Pero se ocupa que cada dos meses se cambien y para ello se requerirán 200 mil pesos por cada renovación.
Las principales causas de los malos olores son el estancamiento de desechos en las tuberías y el arrojo indiscriminado de aceites al drenaje por comerciantes ambulantes y al zinc por las amas de casa.
Personal de la CESPT pidió a la población hacer conciencia y apartar el aceite para llevarse a las recicladoras, situación que requiere de mayor compromiso de la ciudadanía, dijo el representante de CESPT, Miguel Lemus.