Son 107 mil pesos que se pagaron con cheque, que ya fueron cobrados.
Era un regalo para mujeres migrantes y sus hijos que duermen en el suelo, y con un fondo federal se pensó en comprar literas y colchones, pero la mercancía nunca llegó. Esta es la historia.
El 23 de noviembre y luego de que recibieron apoyo con fondos federales, los directivos del albergue Movimiento Juventud 2000 de Tijuana, decidieron comprar 20 literas y 40 colchones que solucionarían de tajo la problemática de personas que duermen en el suelo.
Se dirigieron a la tienda Elektra ubicada en la avenida Constitución, casi esquina con calle Segunda porque era la que quedaba más cerca, seleccionaron la mercancía, hicieron el pedido y lo más importante pagaron con cheque.
Hasta aquí todo iba bien, el gerente y un empleado les aseguraron que las literas llegarían antes del 18 de diciembre, “Día del Migrante”, y es que deseaban que las mujeres y niños dejarán de dormir en el suelo.
Pero esto no pasó y hoy, casi tres meses después, la realidad es que no han llegado las literas, ni les regresan el dinero.
Este viernes, la fachada del negocio propiedad del empresario Ricardo Salinas Pliego, se llenó con hombres y pancartas demandantes.
Lo que nos queda es esperar dicen los afectados, pero la pregunta es ¿hasta cuándo?
