Lo fue un debut que ansiaba un hit que no llegó, se convirtió en uno satisfactorio para los mexicanos y para aquellos que siempre encuentran el lado positivo del béisbol… se encontró en la noche del martes de Padres de San Diego ante Marineros de Seattle.
El segunda base sonorense, Luis Urías, pudo llegar a la primera almohadilla mostrando si paciencia en pitcheos malos y también defendiendo la zona de strike, considerando que se necesitan pitcheos más mortiferos para él.
Urías recibió cuatro roletazos, pero el destacado fue en el primer turno del juego que la pelota apenas salió del diamante pero el mexicano se deslizó por ella y concretó la ruta 43.
En cuanto al bateo, buen consejo de Andy Green sobre la importancia de embasarse que puede ser con pasaporte, un hit, error, o de otra forma, algo que también alentó a Urías para demostrar la razón por la que está en Grandes Ligas que es amor al juego.
El número «9» le fue asignado a Luis, mismo que usó Carlos Hernández en los frailes. El ex receptor comentó que le dará mucha suerte, veamos que sea así.
