De 174 años de antigüedad.
Fue detectado un monumento que para el ex presidente de México, Antonio López de Santa Anna fue un proyecto conmemorativo de la independencia.
Se trata de un basamento de 8 metros de diámetro y 28 centímetros de altura, rodeado por un patio circular de 3 metros de ancho, ubicado al norte de donde actualmente está el asta de la bandera.
Dicho descubrimiento fue por medio de una supervisión arqueológica para rehabilitar la Plaza Constitución.
Según la historia, la primera piedra colocada, fue el 16 de septiembre de 1843.
Por ahora, se han protegido los vestigios históricos del zócalo mediante una cubierta, para permitir la continuidad de los trabajos de rehabilitación de la Plaza de la Constitución, a cargo del Gobierno de la Ciudad de México que por el momento ha propuesto instalar una placa conmemorativa.
