Se estima que en unos años la sequía se agudizará.
Las plantas desaladoras no deben ser consideradas como la única opción para resolver la sequía en Baja California. Aunque han servido en las rancherías agrícolas al sur de Ensenada, en el poblado de San Quintín, también se deben considerar diferentes alternativas como el rehúso del agua, señaló Alberto Pombo, investigador del Colegio de la Frontera Norte.
Actualmente el río Colorado es el principal abastecedor de agua para la entidad, sin embargo más de la mitad del agua se queda en el valle de Mexicali exclusivamente para ser utilizada en actividades agrícolas.
Una posible solución, con menor riesgo e impacto ambiental, debería ser desde la construcción de plantas desaladoras pero también proyectos de rehúso de agua como han iniciado algunas vitivinícolas en Ensenada.