*La causa es por el llamado dólar futuro.
La expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner tiene un auténtico calvario judicial por delante. Está implicada en varias causas por presunta corrupción pero el proceso más avanzado no tiene que ver con supuesto enriquecimiento sino con un asunto diferente: el perjuicio al Estado que se investiga en la llamada causa del “dólar futuro”.
El juez Claudio Bonadío, uno de los más duros con la expresidenta, ha decidido enviarla a juicio oral, con lo que Fernández de Kirchner se enfrentará por primera vez en su vida a un juicio como encausada para el que aùn no hay fecha, pero que sin duda tendrá enorme relevancia política porque sigue siendo una especie de líder de la oposición en la sombra.
La expresidenta no tiene aforamiento alguno pero no corre el riesgo de ir a la cárcel por esta causa: la pena máxima por “defraudación contra la administración pública” es de 1 a 6 años, y sin antecedentes no hay prisión. Pero una condena sería un gran escándalo político.
En cualquier caso no es esta causa la que preocupa realmente a los Kirchner. Son otras por presunta corrupción y enriquecimiento las que inquietan a la familia, ya que están todos implicados, también los hijos de la expresidenta. Esas causas también siguen avanzando aunque más lentamente.
La corrupción ha golpeado muy duro la imagen del kirchnerismo desde que el responsable máximo de la obra pública, Julio López, acabara en prisión después de tratar de ocultar nueve millones de dólares en un convento. Pero la expresidenta tiene un grupo de fieles convencidos de que todo es una operación política y se prepara para ser candidata, con imputación, juicio oral o lo que sea. El vía crucis judicial promete ser muy duro.