Está hecha de feromonas, testosterona, oxitocina y vasopresina.
Anders Sandberg, neurocientífico de la Universidad de Oxford, ha inventado la “pastilla del amor”, una píldora que provoca felicidad, euforia y locura, sentimientos generados por las hormonas presentes durante el enamoramiento: oxitocina, serotonina y dopamina.
El neurocientífico asegura que la oxitocina, conocida como la ‘hormona del amor’, desempeña un papel vital en la salud, la afectividad y la sexualidad. Se genera en el hipotálamo y desde ahí es conducida por una proteína al lóbulo posterior de la hipófisis a través de las fibras nerviosas. De la hipófisis es liberada al torrente sanguíneo para alcanzar los diferentes órganos.
Sandberg revela que la pastilla del amor está hecha de feromonas, olores que desencadenan respuestas de comportamiento en los que nos rodean, en particular en la gente que nos atrae; testosterona, la cual aumenta el deseo sexual tanto en hombres como en mujeres; oxitocina y vasopresina, pro-sociales hormonas que se liberan durante el contacto corporal.
De acuerdo a Sandberg, este fármaco no solo despertaría la pasión por alguien, sino que también podría disminuirla, y solo debería tomarse en casos de separaciones muy dramáticas, ya que asegura que las rupturas pueden llegar a convertirse en depresión o llegar al suicidio.