El regimen de Pyongyang asegura que no rebajará su programa nuclear, y seguirá por la senda actual a un ritmo acelerado.
Como respuesta a las sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU, Corea del Norte aseguró hoy que no sólo no rebajará su programa nuclear, sino que seguirá por la senda actual “a un ritmo acelerado”, aseguró el Ministerio de Relaciones Exteriores en Pyongyang.
El régimen considera las sanciones una provocación y que la resolución refuerza su convencimiento de “seguir este camino a un ritmo acelerado sin el más mínimo desvío hasta que acabe esta batalla hasta el fin”.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó a principios de semana una resolución que limita las importaciones de petróleo del país y prohíbe sus exportaciones de textiles.
La decisión fue una respuesta al ensayo nuclear realizado por Pyongyang el 3 de septiembre, en el que Corea del Norte aseguró haber probado con éxito una bomba de hidrógeno que puede ser montada en un misil intercontinental. El test fue una violación ya de anteriores resoluciones de la ONU.
El martes, fuentes diplomáticas norcoreanas ya habían condenado las nuevas sanciones. El embajador norcoreano ante la ONU, Han Tae-song, aseguró en Ginebra que Estados Unidos “pagará un precio” por ello.
Por el contrario, el presidente estadounidense, Donald Trump, consideró insuficientes las medidas, que en su opinión deberían haber sido aún más duras.