El déficit impacta principalmente a la industria.
Tal y como el agua, la electricidad resulta un problema en cuanto al suministro, que se verá afectado por proyectos como la cervecera y la desalinizadora.
Al igual que el agua, la electricidad para los bajacalifornianos está en riesgo, debido a que el estado está desconectado de la red nacional, y California tiene problemas para exportarla a México.
Para el coordinador de la próxima política económica estatal, Mario Escobedo, la situación se complica si se toman en cuenta las altas cantidades de electricidad que consumirán proyectos como Constellation Brands y la desalinizadora.
El déficit supera los 500 megawatts, razón por la que los empresarios industriales se han visto obligados a generar su propia energía, para evitar riesgos de producción, a eso se suman adecuaciones que se harán a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Llama la atención que la cervecera de Mexicali gastará una cantidad de energía similar al acueducto que trae el agua a la zona costa.
Tanto California como Baja California tienen compromisos para energías renovables, razón por los que un parque eólico alimenta el alumbrado público de Mexicali.
