Llanteras reportan buenas ganancias por baches y lluvias.
Las lluvias y los baches han dejado buenas ganancias a las llanteras de Ensenada, incrementando las reparaciones y compra de neumáticos hasta en un 40 por ciento.
Julio Navarro, llantero desde hace 18 años comentó que debido al deteriorado estado en el que se encuentran las calles del puerto, cuando los automovilistas esquivan un bache caen en otro.
Expresó también que le ha tocado ver casos de rines seriamente dañados tanto de fierro como de aluminio y en algunos casos han quedado irreparables.
Dijo que el mal estado de las calles provoca que las llantas revienten en menos de un año, por lo que recomendó a los conductores salir a tiempo a sus destinos para que se fijen por dónde circulan y tratar de no caer en los hoyos.