Buscan regularizar situación de extranjeros para liberar espacio en albergues.
Alrededor de 3 mil 700 afro descendientes no cruzaron a Estados Unidos, como era su intención, y se quedaron a vivir en Baja California, de los cuales, dos terceras partes están en Tijuana y el resto en Mexicali.
Mil 500 extranjeros siguen durmiendo en los albergues atendidos por la sociedad civil, de acuerdo al Delegado del Instituto Nacional de Inmigración, Rodulfo Figueroa.
Del total, 366 han solicitado realizar el trámite para vivir y trabajar legalmente en México, de los cuales a 131 ya les fue aprobado, 76 como visitantes por cuestión humanitaria y 55 como refugiados.
Lo que se busca es que los migrantes se adapten a la vida productiva del país y los albergues puedan tener mayor espacio para atender a los connacionales ante un posible incremento de deportaciones a raíz de la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, agregó el funcionario durante la reunión del Consejo Estatal de Atención al Migrante que se llevó a cabo en Rosarito.