Este es el nuevo texto de la Señorita Lechuga, lee más
En el ombligo de la luna
me detuve. Le di la espalda al tiempo
y en vez de caminar lo venidero
-nadie me espera allá-
volví a caminar lo caminado.
Octavio Paz, » El regreso» (1943)
Con él me sentí en el ombligo de la luna. Lo abrazaba y tocaba el cielo, sus ojos casi verdes me anunciaban un nuevo paraíso. Un mes de novios.
Para celebrarlo le dediqué un playlist con cinco canciones que auguraban mi buen amor (un playlist que nunca entendió o a lo mejor ni lo intentó). Tenía días sin responder mis llamadas a tiempo, los pretextos para no vernos iban de lo lúdico hasta un dolor cotidiano. Algo pasaba pero no hice caso y seguí; es que el amor te hace tener el ánimo de una estalactita.