Facilitará la concesión de visados y permisos de residencia a extranjeros que tengan estudios superiores.
El presidente estadounidense, Donald Trump, revelará un cambio profundo del sistema migratorio norteamericano que pondrá en valor el mérito, la formación y el dominio del inglés por encima de la reunificación familiar o el asilo.
Dicha reforma ha sido diseñada por su yerno, Jared Kushner, y ya han sido informados miembros de los partidos republicanos y demócrata en el Capitolio.
Si la reforma migratoria se aprueba se facilitará la concesión de visados y permisos de residencia a extranjeros que tengan estudios superiores, hablen inglés y obtengan ofertas de trabajo por parte de empresas norteamericanas.
Además, se facilitará que aquellos estudiantes extranjeros que estudien en universidades norteamericanas se queden en EE.UU. sin tener que regresar a sus países de origen.
Si la propuesta de Trump se aprueba en el Capitolio, se mantendrá el cupo de 1,1 millones de permisos de entrada y residencia, pero la reunificación familiar se limitará a un tercio de esos visados.
Según la Casa Blanca, en este momento sólo un 12% de los inmigrantes obtienen permisos de entrada a causa de sus méritos académicos o la excelencia en el trabajo, frente al 67% de Canadá.
Aunque EE.UU. no tiene idioma oficial y cuenta con varios ciudadanos que hablan español, Trump propondrá también que aquellos que demuestren un buen manejo del inglés tengan preferencia a la hora de ser aceptados como residentes.
Esta reforma no soluciona el problema de los ‘dreamers’, los hijos de inmigrantes ilegales llegados a EE.UU. de niños y que se encuentran en situación irregular.
